El omega-3 es un ácido graso natural proveniente del pescado y el
aceite de pescado. Es un poderoso anti-inflamatorio que ayuda a prevenir el
riesgo de enfermedades cardiacas hasta un 60% entre otros beneficios al cuerpo.
Recientemente descubrí que la absorción de este fabuloso
anti-inflamatorio se reduce grandemente cuando ingerimos igualmente aceites
vegetales como: aceite de soya o de maíz, entre otros. La razón para esto es que
estos aceites tienen un alto grado de Omega-6 inflamatorio ácido graso e
incrementa la formación de triglicéridos. Todo esto le resta valor al Omega-3.
El Dr. Dev en su libro “The Brain Fog Fix” nos da una clara explicación
de la necesidad de balancear el consumo de Omega-3 y Omega-6 para nuestra salud
en general y para mantener una claridad mental. El sugiere el uso de aceite de
oliva regular para cocinar y aceite de oliva extra virgen en nuestras ensaladas
y demás platos donde el aceite no será expuesto al calor. Es importante saber que
el aceite de oliva extra virgen se descompone cuando es expuesto al calor. Por
eso se debe usar el aceite de oliva regular para cocinar.
En conclusión: debemos consumir omega-3 diariamente, quizás alejarnos
de los aceites vegetales y utilizar aceites de oliva o aceites de coco que también
ha probado ser saludable (por ahora)
Ingredientes: Aceites de Oliva o Aceite de Coco
Ingredientes: Aceites de Oliva o Aceite de Coco
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